Algunas personas llegan a padecer el famoso síndrome posvacacional, basado en tristeza, decaimiento y agobio por tener que volver a afrontar las tareas y tener menos tiempo libre. Así que estos tips te van a ser muy útiles para retomar la rutina con ganas tras las vacaciones.
- Vuelta a la rutina con ganas
- Beneficios de una dieta saludable y equilibrada
- Beneficios del deporte para la mente
- Cómo cuidar la salud mental
Vuelta a la rutina con ganas
La clave es partir de una buena actitud. Tener pensamientos negativos o recrearte en que ya no puedes seguir haciendo lo mismo que en vacaciones, solamente va a empeorar la situación. Procura ver el vaso medio lleno y centrarte en todas las cosas buenas que también tienes en tu rutina: tener un trabajo, estar más activo, sentirte productiv@, reencontrarte con tus compañeros, el café que tomáis en el descanso o al plegar, el poder ir después juntos al gimnasio o de compras…
La gratitud por lo que tienes te ayudará a valorar más las partes positivas de la vida. Al mismo tiempo, evita rodearte de noticias o relaciones tóxicas, consiguiendo relaciones fuertes y saludables con los demás que te harán sentir que tienes un buen apoyo en caso de necesitarlo, en días tristes o problemáticos.
Para que sea más llevadero, durante los primeros días de tu reincorporación abarca lo más importante, planifica objetivos realistas diariamente y mantén la mente ocupada. Crear un nuevo proyecto ayuda mucho a volver con ilusión a la rutina tras las vacaciones, plantéatelo. Además, ahora tienes la mente fresca y eso contribuirá a la creatividad y motivación. ¡Seguro que es todo un éxito!
Beneficios de una dieta saludable y equilibrada
Una vez más, lo segundo más importante es cuidar la alimentación y moverte lo suficiente. Son muchas las personas que en periodos de tristeza, aburrimiento o estrés sienten hambre emocional, es decir, cierta sensación de ansiedad frente a la comida en general o frente a algunos alimentos que suelen ser de baja calidad nutricional: chocolate con leche, patatas fritas de bolsa, chucherías, embutido… Evita esto y vuelve a retomar una alimentación saludable, basada en la Dieta Mediterránea, para bajar también esos kilitos que solemos ganar en verano a causa de los excesos.
Preocúpate también por alimentar a tu Sistema Nervioso con hidratos de carbono complejos, triptófano, vitaminas del grupo B, hierro y ácidos grasos poliinsaturados. El triptófano es un aminoácido esencial que ayuda a la producción y mantenimiento de las proteínas, músculos, enzimas y neurotransmisores como la serotonina, también llamada “hormona de la felicidad”. Por eso, 2 comprimidos diarios del complemento alimenticio Triptófano con Magnesio y Vitamina B6. nos ayudarán al equilibrio emocional, estando más animadxs y relajadxs durante esta época del año. Si te cuesta algo tan básico como tener un sueño reparador, ¡escoge entonces la variedad con Melatonina!
Beneficios del deporte para la mente
Además de comer bien, está comprobado que el deporte sirve de gran ayuda para mejorar el estado de ánimo, mediante la regulación de las hormonas del estrés. Los altos niveles de estrés ponen a prueba nuestro cuerpo porque nos hacen sentir en una situación de alerta constante que requiere de mucha energía y agota. Como consecuencia, podemos desarrollar problemas físicos y psicológicos, como dificultad para concentrarnos, trastornos del sueño o problemas digestivos. La práctica regular de ejercicio ayuda a gestionar el estrés, agranda las cámaras del corazón, mejora la tensión arterial, contribuye a controlar los niveles de azúcar en sangre y reduce el decaimiento. Así, combinar trabajos aeróbicos con ejercicios diarios moderados te convertirá en una persona más feliz.
Cómo cuidar la salud mental
No te olvides del autocuidado, de procurar estar en equilibrio por dentro. Cuando salgas del trabajo, dedica menos tiempo a las tecnologías y busca conectar siempre con la realidad, recurriendo a actividades que te motiven y te hagan crecer personalmente, y a técnicas de relajación, como la respiración profunda, el yoga o la meditación, que ayudan a reducir la presión arterial, la tensión muscular y el e4strés.
Y si tienes un mal día, simplemente acepta las emociones negativas. Aprender a no castigarnos por cometer errores o sentir debilidad, se relaciona con menor probabilidad de padecer ansiedad, depresión o baja autoestima, por lo que nos ayuda a cuidar la salud mental. Se trata de no estresarse, de volver a la rutina de forma progresiva, sin que haya efectos secundarios por el camino. Planifícate de forma realista y sin agobiarte si no consigues de entrada todos tus propósitos. ¡Quien hace lo que puede, no está obligado a más!
¡Que esta vuelta a la rutina sea el comienzo de grandeslogros y sorpresas!»
Soy una fiel seguidora desde Italia
Super el Blog