GABA: ¿qué es y cómo te ayuda a dormir mejor?

Cuando una persona no descansa lo suficiente, pueden verse afectadas funciones cognitivas como la concentración o la memoria a corto plazo, y se reduce la capacidad de aprender y retener nueva información. El insomnio también dificulta el razonamiento y la resolución de problemas, aumenta el cortisol, la irritabilidad y el riesgo de acabar padeciendo depresión o patologías cardiovasculares.

En cuanto a la salud física, hay un envejecimiento prematuro de las células, el sistema inmunológico puede verse debilitado y combate enfermedades con menor efectividad. Además de que, obviamente, se tiene poca energía y bajo rendimiento, en el organismo se produce un desequilibrio hormonal que afecta a los niveles de aquellas hormonas que regulan el apetito y la glucemia, lo que fomenta un aumento de peso considerable.

• ¿Qué hacer si te cuesta dormir por la noche?
• ¿Qué es un neurotransmisor? Tipos:
• GABA: funciones y propiedades
• Déficit de GABA y consecuencias
• Fuentes de GABA
• Triptófano con Gaba + Pasiflora y Magnesio de Ana María Lajusticia^®

¿Qué hacer si te cuesta dormir por la noche?

Si padeces insomnio, es fundamental tratar de identificar sus causas (estrés, malestar emocional, trabajo a turnos, viajes constantes, cambio de horario, vida sedentaria, tipo de alimentación, ciertos medicamentos, etc.) y aplicar cambios en el estilo de vida, como mantener una rutina de ingestas y sueño regular, asegurar el aporte de ciertos nutrientes, practicar técnicas de relajación, evitar la cafeína y las pantallas electrónicas antes de acostarte.

En casos más graves o persistentes, recomendamos buscar ayuda médica o psicológica para tratar el insomnio lo antes posible y evitar consecuencias más graves para la salud.

¿Qué es un neurotransmisor? Tipos:

Los neurotransmisores son sustancias químicas del cuerpo humano que permiten que las neuronas se comuniquen entre sí y que el cerebro pueda realizar sus amplias funciones, entre ellas, dormir. Existen de diferentes tipos, como verás a continuación (los dos primeros están relacionados con el descanso nocturno):

1. Inhibidores: estos calman, reducen la actividad del cerebro y promueven la relajación y el sueño, como lo hace GABA, que reduce el estrés mental, nos calma y relaja para conciliar el sueño fácilmente.
2. Neuromoduladores: ayudan a regular el estado de ánimo y la energía, como la famosa serotonina, la cual sintetizamos a partir del triptófano y relacionamos con la felicidad y el buen humor. Además, a partir de ella producimos melatonina, hormona que regula los ciclos de vigilia – sueño.
3. Excitatorios: estimulan el aprendizaje, la memoria y la regulación de los estados emocionales. Como el glutamato, que interviene en el aprendizaje.
4. Neurotransmisores de «Alerta»: nos activan y despiertan manteniéndonos activos y atentos, como la dopamina, que estimula la motivación, la atención y la sensación de placer-recompensa.

GABA: funciones y propiedades

Como has podido leer en el apartado anterior, el ácido gamma-aminobutírico (GABA), actúa como el principal neurotransmisor inhibidor del sistema nervioso central. Sus niveles adecuados aportan tranquilidad y relajación, además de mejorar la respuesta del cuerpo frente a niveles de estrés altos que dificultan el sueño. De hecho, estudios recientes han demostrado científicamente que la activación de los receptores GABA tiene efectos hipnóticos que frenan los pensamientos repetitivos y favorecen el descanso nocturno.

Déficit de GABA y consecuencias

El neurotransmisor GABA juega un papel crucial en la regulación de la ansiedad, por eso, cuando hay déficit se perciben síntomas como inquietud, tensión muscular, fatiga crónica, preocupaciones excesivas, hipertensión y ataques de pánico. Su falta también puede causar insomnio, despertares nocturnos o el síndrome de piernas inquietas, ya que el cerebro se mantiene en un estado de alerta excesiva.

Algunas personas con depresión tienen niveles más bajos de GABA en ciertas áreas del cerebro, lo que podría provocarles tristeza, falta de motivación e incapacidad para experimentar placer. También puede alterarse la plasticidad sináptica, la memoria y la capacidad de tomar decisiones.

Poner remedio a estos bajos niveles ayudará a acabar con los síntomas y a mejorar notablemente la calidad de vida gracias a los beneficios del GABA.

Fuentes de GABA

Existen alimentos que pueden ayudar a aumentar los niveles de GABA de forma natural:

• El neurotransmisor GABA se sintetiza a partir del aminoácido glutamato, que a su vez deriva de la glutamina. Por ello, consumir alimentos ricos en glutamina puede contribuir a la producción de GABA en el organismo.
• Producción de GABA en el cerebro. Algunos de estos alimentos son las carnes magras, los huevos, los lácteos, las legumbres, los frutos secos y el arroz.
• Los alimentos fermentados, como el yogur, el kéfir o el chucrut, son una excelente fuente de probióticos que pueden influir en la producción de neurotransmisores como el GABA a nivel cerebral.
• La vitamina B6 es crucial para la producción de neurotransmisores, incluido el GABA. Algunos alimentos ricos en esta vitamina son el pollo, el pescado, el plátano, el aguacate, la espinaca o la patata.
• Algunas infusiones con propiedades calmantes pueden estimular la producción de GABA en el cerebro, como la manzanilla, la valeriana o la pasiflora.
• Los alimentos ricos en magnesio, como sabes, ayudan al normal funcionamiento del sistema nervioso y a la síntesis de neurotransmisores. Entre ellos destacan el cacao puro, las semillas, las legumbres, los frutos secos, las verduras de hoja verde y el aguacate.

Triptófano con Gaba + Pasiflora y Magnesio de Ana María Lajusticia^®

En Ana María Lajusticia^® combinamos GABA con triptófano, magnesio y pasiflora para conseguir bienestar emocional, relajación y mantenimiento del sueño durante la noche. Nuestro complemento Triptófano con Gaba + Pasiflora y Magnesio aporta la combinación perfecta de ingredientes para un descanso total: además de propiciar el sueño, ayuda a descansar en las horas adecuadas, favorece la relajación física, la desconexión mental y el descanso que el cuerpo necesita. Está indicado para personas con tendencia a padecer dificultades para dormir o despertares nocturnos y para temporadas de mayor estrés o ansiedad, que impiden dormir bien.

Pueden tomarlo las personas mayores de 12 años que no padezcan insuficiencia renal grave ni estén en tratamiento con fármacos que intervienen en la secreción de serotonina (antidepresivos o fármacos psicotrópicos). En caso de duda, es recomendable consultar con el médico de referencia. Las mujeres embarazadas y en periodo de lactancia deben consultar con su profesional de la salud antes de tomar cualquier complemento alimenticio.

Como has visto, el insomnio es un problema multifactorial complejo pero, con cambios en los hábitos de vida, el manejo del estrés, complementos alimenticios y técnicas de relajación, muchas personas pueden mejorar la calidad de su sueño y su salud en general. ¡Deja de darle vueltas, duerme como necesitas!

Gisela Fernández
Dietista-Nutricionista y Tecnóloga Alimentaria del equipo de Ana María Lajusticia®